El Congreso que nos representará
los próximos cinco años viene mostrando su faz menos honesta con una serie de
denuncias contra sus integrantes.
El comercio
A menos de tres meses de
instalado el nuevo Congreso de la República, las denuncias sobre sus
integrantes del Legislativo y los ilícitos en los que habrían incurrido hacen
más noticia que los avances en materia legal de este Poder del Estado. Varios
se suman a la hoy descubierta Celia Anicama.
Eulogio Amado Romero Rodríguez,
ahora rebautizado como ‘comeoro’, no se hizo conocido por impulsar alguna
iniciativa legislativa sino más bien tras difundirse la denuncia de El Comercio
el que un grupo de mineros ilegales le pagaba 30 gramos de oro, desde hace un
año, para permitirles operar al margen de la ley en Madre de Dios. Asimismo, el
diario descubrió que el congresista controla a través de terceros, otras 10
concesiones mineras artesanales.
Néstor Valqui Matos es otro padre
de la patria con oscuro historial delictivo. Junto a su esposa, Edy Estrada
Atencio, el congresista fujimorista por Pasco figura como dueño del Night club
Discotek Calusa, el centro de diversión nocturno más grande de Yanacancha. Ahí,
se explotaba sexualmente a jóvenes y adolescentes traídas principalmente de
Huánuco, Ucayali y Junín. De hecho, sobre Valqui pesa una condena por
proxenetismo de dos años de prisión suspendida y el pago de S/.500. Hoy niega
que tenga mayor nexo con el negocio, aunque el tema no ha quedado zanjado del
todo.
César Yrupailla Montes, también
humalista por San Martín, es investigado por extraer arcilla del Estado de
manera ilegal en el referido departamento, a través de dos ladrilleras que
según él creó para estudiar la propiedad de la cascarilla del arroz y sustentar
así su tesis doctoral. La 2da. Fiscalía Provincial Penal lo investiga por
falsedad ideológica y defraudación tributaria, aunque su inmunidad ha detenido
la investigación.
María López Córdova, congresista
de Fuerza 2011 por Áncash, según un informe de la Fiscalía Especializada en
Crimen Organizado, debe ser investigada por presunto lavado de activos a través
de sus empresas y propiedades.
Su compañero de bancada,
Francisco Ccama Layme ha sido denunciado por temas referidos contaminación
ambiental, lavado de activos y hurto, a través de su actividad minera en Puno.
Aunque es investigado por la Fiscalía Especializada en Medio Ambiente, integró
con el congresista ‘comeoro’ la Comisión de Energía y Minas del Legislativo.
Wilder Ruiz Loayza y Federico
Pariona —del humalismo y fujimorismo, respectivamente— han sido denunciados
penalmente por el Jurado Nacional de Elecciones nada menos que por mentir en su
declaración de hoja de vida. El delito: contra la función jurisdiccional en la
modalidad de falsa declaración.
A ellos se suma el congresista de
Fuerza 2011 por Huánuco, Alejandro Yovera Flores, denunciado por el Ministerio
Público en agosto por haber mentido al decir que estudió una maestría en la
Universidad de Piura: la casa de estudios lo desmintió. Yovera presentó un
hábeas corpus con el fin de evitar que le levanten la inmunidad parlamentaria y
sea derivado al Poder Judicial.
Dicho sea de paso, la Comisión de
Ética del Congreso, presidida por Humberto Lay, tendrá que además procesar a
Josué Gutiérrez Cóndor, el acompañante de Alexis Humala en Rusia; al moqueguano
Vicente Zeballos (de Solidaridad Nacional) por cargos de peculado en
cumplimiento de su función como alcalde de Moquegua; y también a Justiniano
Apaza Ordóñez y Tomás Zamudio Briceño denunciados por la Federación de
Trabajadores del Sistema Nacional de los Registros Públicos. Apaza es dueño de
una empresa de transportes y preside la Comisión de Transportes en el
Legislativo. Zamudio no declaró como propiedad una chacra 9.300 metros
cuadrados ante el JNE; aún así, preside la Comisión Agraria.
