Gracias a la ética y solidaria cadena productiva que ha establecido desde el inicio de sus actividades en el mundo de la moda, el diseñador arequipeño Henry Vela Vera participa en el “Ethical Fashion Day” en Marsella y el “Day-D Green” en Paris, este 26 y 28 de marzo.
Estas dos importantes ferias buscan resaltar a las empresas del rubro del diseño de modas de todo el mundo, que mediante sus actividades productivas impulsan un comercio ético, propician un beneficio económico equitativo entre todos los participantes de la cadena productiva y siguen políticas de protección y respeto al medio ambiente.
Vela Vera ya había sido invitado a realizar una breve participación en la feria “Ethical Fashion Show” en París, el 2010, tras ser evaluado por una comisión de las escuelas Euromed Managment de Marsella, le ofrecieron una mayor presentación en la edición de este año. Por su parte, la Escuela de altos Estudios de Comercio en Paris (ESEG) le ha comprometido exhibir sus diseños en el “Day-D Green”, además de realizar una charla informativa sobre este tipo de iniciativas en el mercado textil peruano.
Para la confección de sus diseños, Vela Vera impulsa los “ateliers nomadas”, es decir identifica a mujeres que dominan las técnicas de hilado y tejido de fibras de alpaca y oveja, y las anima a asociarse entre ellas o que de manera individual confeccionen las prendas. Muchas de estas mujeres son madres solteras o campesinas en situaciones precarias debido a la pérdida de modos de trabajo tradicionales. Asimismo encarga sus confecciones a asociaciones de mujeres artesanas de asentamientos humanos o asociaciones impulsadas por empresas mineras como Cerro Verde.
Son tres los valores en los que dicho diseñador basa su negocio sostenible: respeto al medio ambiental, beneficio equitativo y conservación de la memoria cultural. En el primer caso se obtiene la materia prima en comunidades que crían a sus animales en condiciones naturales, con alimentación y agua libre de contaminantes; y se utilizan tintes naturales o se conserva el color natural de la fibra.
El segundo valor enmarca, además de impulsar una alternativa de trabajo para mujeres en situaciones difíciles, un salario justo que reconozca la labor y el saber de cada artesana, asimismo se paga a los criadores de alpaca un monto por encima del mercado, de tal forma que puedan mantener las formas de crianza limpia y se asegure la materia prima.
En cuanto a la conservación de la memoria cultural, tiene mucho que ver con el diseñador, quien pasó gran parte de su infancia en un pueblo de la provincia arequipeña de Cotahuasi, viendo como los artesanos convertían las fibras de alpaca y oveja en hermosas piezas de uso diario.
DATOS
Henry Vela Vera, arequipeño de nacimiento, realizó estudios de diseño en Nueva York y Francia. Se inicio en “ateliers” de diseñadores y empresas independientes en Europa.