jueves, 24 de febrero de 2011

AREQUIPA SIN UN INFORME DE SEGURIDAD DE PRESAS

El sistema de represas de la cuenca del Chili no tiene un informe de seguridad debido a que el último realizado fue hace 14 años, y no se encuentra en los archivos de AUTODEMA. Según explicó el gerente de esta institución, Ronald Arenas las transferencias efectuadas por el INADE en los últimos años desaparecieron, las que presumen deben tenerlas en la Autoridad Nacional del Agua, documento que se exigió a esta dependencia en el Comité Multisectorial puesto que es de vital región.



Además escapa del control de AUTODEMA el monitoreo de dos nuevas represas construidas recientemente por EGASA e integradas al sistema como Bamputañe y Chalhuanca descargas que no son notificadas ni monitoreadas, lo que reviste mayor peligro porque desconocen la cantidad de agua de aforo que pudiera estar soltando EGASA a la cuenca.

Según explicaron los técnicos el informe ayudaría a conocer las deficiencias de cada una de las represas sobre todo la de El Frayle, que no puede alcanzar su máximo almacenamiento de 210 millones de metros cúbicos al registrar daños estructurales que le permite técnicamente sólo llegar a 135 millones, cantidad que no se arriesgarán a llenar. Un estudio adicional de la Universidad de Lisboa recomendó sólo 130 millones de metros cúbicos considerando que un movimiento sísmico podría colapsar su estructura.

Es decir, antes que empiece a rebosar y se convierta en incontrolable el aforo, han decidido abrir las compuertas y soltar 20 metros cúbicos que controlará la represa de Aguada Blanca y será conducido a la cuenca del Chili.

El subgerente de recursos hídricos de AUTODEMA, Jaime Huerta, explicó que el monitoreo es riguroso y estricto, hasta satelital de las represas, garantizó una información cada segundo, pero advirtió que no pueden controlar las precipitaciones por lo tanto ir soltando agua lentamente es una sugerencia que debe efectuarse para no lamentar reboses que pueden afectar no sólo al sistema de agua potable, sino también de energía y a la agricultura.

La represa de El Frayle fue construida en 1954 para una capacidad de 210 millones de metros cúbicos, no cuenta con un aliviadero que lo hace más peligrosa su descarga y rebose, más aún que la zona de cazadores se encuentra en pésimo estado por donde se realizan las descargas. Sólo el informe técnico podrá determinar acciones a efectuar por lo pronto no puede

llenarse y el comité técnico solicitó oficialmente el documento a la ANA.

Fuente: El Pueblo