sábado, 1 de octubre de 2011

Essalud: historias de terror


Por Pedro Francke


Llevo menos de un mes como nuevo Gerente General de Essalud. Es una corporación gigante: S/. 6,400 millones de presupuesto anual, 45 mil trabajadores, 12 grandes hospitales nacionales e institutos especializados y un total de 373 establecimientos para dar servicios de salud y prestaciones económicas y sociales a cerca de 9 millones de asegurados.

No es noticia decir que los asegurados somos muy mal tratados. Pero poco se sabe de la situación de la administración, de la cual estas historias breves, sacadas de mi bitácora de viaje, dan buena cuenta:

Día 3. Mi correo electrónico no funciona, nuevamente. Ni puedo abrir internet. No tengo acceso a esta herramienta básica que usan los niños de 5 años. El Jefe de la "Oficina Central de Tecnologías de Información y Comunicaciones" no tiene ni estudios ni experiencia sobre el tema. Hay que cambiarlo.

Día 8. Aprovecho un respiro para visitar la Emergencia del Hospital Rebagliati: hay 205 pacientes cuando su capacidad es de solo 120. Hay un proyecto para ampliarla, pero el expediente técnico todavía no está concluido. Mientras tanto, hay que reforzar con lo que está a la mano.

Día 10. Una revisión de los informes de control interno muestra irregularidades por doquier. Miles de funcionarios han sido observados. Entre las perlas de años anteriores: el INCOR compró los mismos insumos que el Almenara había comprado a precios 50% superiores, lo que implicó S/. 870 mil de pérdida; la licitación de la construcción del Hospital de Pisco por S/. 34 millones la ganó una empresa que no cumplía con los requisitos técnicos pedidos.
Día 12. El balance económico muestra déficits que superan los S/. 600 millones en el último año y medio. De la reserva técnica, guardada para emergencias, se usaron S/. 205 millones sin sustento. Hoy, por cada asegurado que debemos atender, tenemos 10 por ciento menos presupuesto real que 5 años atrás, mientras los precios y la tecnología hacen que las necesidades sean cada vez mayores.

Día 15. Pobladores de Apurímac protestan porque alguien dice que el tomógrafo comprado para el nuevo hospital de Abancay se iría a Piura. No dicen que el nuevo Hospital de Abancay todavía demorará doce meses o más en construirse (la construcción recién va a empezar). Tampoco que, por error, había no uno sino dos tomógrafos comprándose para Abancay. Hay otros 3 o 4 tomógrafos en cajas sin usar; el de Cajamarca lleva 5 meses en cajas sin mayor resguardo y se renovó, por un año más, el contrato de servicio de tomografía en una clínica privada (además, el hospital tiene goteras!!).

Día 18. El nuevo Gerente de Presupuesto informa que el presupuesto, de S/. 6,400 millones¡!, se hace en una hoja Excel. No funciona un sistema de información presupuestal. El cuadro que le presentaron tenía, lógicamente, errores: faltaban 1,8 millones en una suma.

Debo cambiar mis previsiones. Pensaba que lograr una administración razonable de la institución y resolver las situaciones críticas tomaría 3 meses, y que luego de eso podríamos iniciar las mejoras estructurales que se requieren para avanzar fuerte en inclusión social, democratización y eficiencia. Pero han dejado esta enorme máquina que es Essalud haciendo agua por todos lados y evitar que se termine de hundir será una tarea titánica.