El valioso recurso hídrico de las copiosas lluvias, ya no se desperdiciarán más, gracias a la enorme infraestructura.
El año agrario presente está asegurado para los 42 mil 615 agricultores de la cuenca no regulada sur oriental y población de escasos recursos económicos. Como se recuerda, siempre padecieron de una inadecuada disponibilidad de agua de riego, por falta de una represa, que almacene las aguas provenientes de afluentes que se presentan sólo en época de lluvias.
A la fecha, la imponente obra de infraestructura agraria registraría más de 4 millones de metros cúbicos de agua, de no ser por la descarga de 150 mililitros por segundo que ya discurre. Este aforo se incrementará posteriormente para dotar de agua a los sembríos que fueron castigados por la sequía propia del lugar.
Con la represa “San José de Uzuña”, los agricultores podrán utilizar el agua para irrigar los cultivos bajo riego tecnificado aceptable, lo que favorecerá a incrementar la productividad competitiva agroindustrial frente a la producción actual, si así lo disponen.
Entre los pueblos favorecidos están los cercanos a los cerros Yanaorco, Paltaorco, Polobaya. Además, la acumulación del recurso hídrico permitirá habilitar más de 3 mil hectáreas de cultivos de agroexportación de los distritos de Quequeña, Yarabamba, Pocsi, y Mollebaya.
La represa de tierra edificada entre los cerros Yanorco y Paltaorco en Polobaya, fue diseñada para almacenar 10 millones de metros cúbicos de agua provenientes del río Poroto. La presa tiene 33 metros de altura, recubierta de geomembrana, cuenta con aliviaderos, puente, túnel, desvío provisional del río, conducto de descarga, diques, e instrumentación requerida.
El presidente regional, Juan Manuel Guillén Benavides dijo que ha sido un buen año para los agricultores por las abundantes precipitaciones pluviales, se espera almacenar la mayor cantidad de agua y así desarrollar de forma sostenible las zonas rurales, mediante diversas obras y detener el proceso migratorio de las poblaciones, promoviendo el empleo de mano de obra agrícola-ganadera, y de esta forma crear fuentes de trabajo permanente.
Fuente: El Pueblo
